Tuesday, July 28, 2020

Entre Efimera o Eterna







Creo que nunca me separé de ti, supongo que tu cuerpo se ha ido de esta casa, pero tú voz, tu carácter y tus ojos quedan dentro de mi alma.

A veces ando en la cocina y recuerdo cuan poco te gustaba el fruto del mar y entonces cocino pasta; otras veces me levanto y hago el café como a ti te gustaba, para servirmelo y disfrutar de ese sabor a ti cuando te besaba.

De tanto en tanto, beso otros labios y entro en otro cuerpo como quien al explorar quiere conseguir lo que ya amaba, a menudo entregó vida en cuerpos muertos, a menudo me sorprendo que ni en un millón hay una que ame como tú.

A veces me quiero volver a enamorar y me vuelve la pasión que creaste en mi, pero a la final se que me quiero volver a enamorar solo para desafiar a cualquier mujer, para decirle al mundo que no hay otra como tú, y así no me puedo enamorar.

Otras mañanas me despierto, con desaliento solo para esperar una voz al lado de mi almohada que me ordenase levantarme, yo se que no estás ahí, pero te escucho. En público a veces carezco de interés por hablar con otros, pero por un momento te pienso y hablo como si estuvieses allí al lado mío, yo se que no estás allí, pero te siento tan cerca.

Algunas veces hemos hablado por coincidencia, por nuestro perro, por darnos ánimo o apoyo, yo se que no volverás, pero aún así pienso en ser tan fuerte que así sea en mi último día aunque sea un beso de ti me pueda llevar conmigo a lo que sea que me espere, si el cielo o muy debajo de la tierra.

Me has dicho que el saber no lo era todo, ni el análisis, ni Freud con Lacan, que a veces se aprende también sin saber que hay un saber, y así entiendo que me pides seguir adelante y que no compare, pero es difícil y lo sabes.

Lo que tú sabes es que yo sufro, lo que tú no sabes es que vives conmigo, al punto que cada vez que he decidido estar con alguien, siento que en esencia solo te he vuelto a ser infiel, porque me siento más contigo, que con la carne vacía que se monta en el plato del momento con la pretensión de tener un corazón.

Y así, te alucino, o de ti me lleno de delirios, o eres el fantasma en las paredes que remueve todo, o eres las fotos que tengo guardadas y veo sin abrir los ojos... Por cierto, aún te amo, a pesar de los años.

Aún pienso en ti a finales de julio, a comienzos de noviembre, en las mañanas de verano, los fines de semana en la montaña, las navidades cuando había familia, aún te pienso por el fruto que hicimos el día de las madres, aún recuerdo cuánto me decías que me  superaría a mi mismo, porque mi voluntad y fuerza no tenía comparación a nadie cuando me decidía a algo.

Si tan solo hubieses sabido que tú no eras mi sombra sino todo aquello que me daba fortaleza, eras tú y que aún lo sigues siendo, porque no conocí mejor versión de mi, que aquella que tú lograbas con tus maneras.

No hay acto en el mundo que salde a su vez la deuda que tengo contigo por haber sido amado por ti. De a momentos de ti me despido como diciendo que eres historia del pasado, pero prefiero tener la casa sola al llegar, sin sustitutas, ni amigos, ni familiares para así poder pensar en ti, sin escuchar sus pateticos consejos. No quiero invitados, ni deseo amoríos vacíos, solo déjame formar tu figura con las almohadas y sígueme hablando al oído.



--------------------------------------------------------------

Manuel Alessandro Magnante
[ 28 de julio de 2020]
"La Que Nunca Se Fue"
*Sin Edición

--------------------------------------------------------------

Video:
Melendi - "Tu Jardin Con Enanitos"